Me volvieron a hablar de ti y en ese momento me hice el valiente no era prudente que supieran que tu recuerdo aun me tortura.
Que hay noches en las que observo tus fotografías y la tristeza me embarga, todos esos sentimientos vuelven a mi con tanta fuerza como el mar bravío en una tormenta intentando hundir un barco.
Veo la lluvia caer mientras mi cigarrillo se consume y me gusta pensar en una versión de mi vida junto a ti.
Pero recuerdo que te gustaba ser libre y era tu libertad lo que yo amaba tanto de ti ¿Cómo podría enjaularte?, ¿Cómo podría obligar a quedarte? Te amaba con demasía y ahora esa misma libertad te apartó de mi.
Te fuiste a volar hacia otro cielo, tal vez si hubiera sido más egoísta, si te hubiera demostrado suficiente amor aun volariamos juntos.
Ahora solo espero que llueva tan fuerte y tan intenso que el agua se lleve todos estos recuerdos consigo y te borre de mi mente, algo que todas mis borracheras en tu nombre jamás lograron
Y aquí estoy sentado viendo la lluvia deseando ser una pequeña gota para impactarme contra el seco pavimento y que todo acabe en un instante.
Pero la vida no puede ser tan sencilla ¿cierto? El vivir no es para los cobardes. La vida, el vivir es de valientes.