Mes: abril 2016

Aquello de Escribir…

Es curioso como a medida te adentras en un libro, serie, película, etc…  Le vas tomando cierto cariño a los personajes y no quieres que le pase nada malo. Quisieras poder impedir las situaciones y golpear al autor si es posible para que desista de lastimarlo.

Pero que pasa cuando sos un aspirante a novelista y creas tu propia historia y por ende amas a todos tus personajes porque obviamente son tu creación, son tus hijos, parte de ti
¿Como te haces entender a vos mismo que es necesario que el personaje sufra porque es parte de la trama?, ¿cómo?

Creo que en mi viaje como aspirante a escritor me he topado con el problema de tener que matar personajes aunque tal vez no quiera pero que es un punto necesario para el desarrollo de la historia.

Es curioso porque no tengo problemas para que me llegue la inspiración. Solo me siento me pongo los audífonos y mientras me desconecto del mundo a través de la música es como si mis manos escribieran solas.  Pero mi único problema es el de jugar a ser Dios con mis propias creaciones y decidir sobre su futuro dentro de la historia.

Lo único que me consuela es pensar que sus muertes son parte de un plan más elaborado y que su sacrificio sirven a un bien mayor y esperar que muchos puedan conectarse con ellos y llegar a quererlos o llegar a odiarlos. Lo importante es hacerles sentir algo.

La decisión de escribir se ha vuelto una odisea total, me gusta compararla con el viaje del capitán Ahab abordo del Pequod.
Uno sale en busca de su objetivo y se termina topando con un gran cachalote blanco que quiere hundir el barco.

Para muchos es una pérdida de tiempo escribir, para otros la idea de un libro es un gasto nada más.
En este pequeño pedazo de tierra para alguien que escribe y no tiene contactos difícilmente puede conseguir que su libro sea publicado y la idea de pensar que eso te puede dar de comer es descabellada.

Pero aún sabiendo todo esto muchos nos embarcamos en este viaje dispuestos a naufragar y en el horizonte ver arder a nuestro Pequod y aún así regresar a puerto y volverse a embarcar porque los que desisten de sus sueños están condenados a quedar en el olvido.

Es como alguien me dijo una vez «El qué tenga que decir algo que lo escriba» sinceramente no se a donde me llevará este viaje en el que me he embarcado, voy directo a aguas que nunca he visto pero me imagino un gran océano azul al final del viaje. aunque para llegar ahí es probable que tenga que enfrentarme con todo tipo de monstruos que buscarán hundir mi nave porque no quieren que yo avance.

Pero este capitán está decidido a enfrentarse a ese intempestivo mar, no tiene miedo de nada.  Han sido muchos años los que pospuse este viaje así que esta vez ya no tengo la intención de hacerlo.

Pero no todo es malo dentro de el mundo literario, los personajes te regalan emociones, enojo, odio, tristeza, lágrimas, sonrisas, carcajadas y a pesar del hecho de que a veces es necesario hacer sufrir a nuestros personajes o incluso matarlos siempre existe la posibilidad de cambios en ese universo, de nuevos personajes, de una nueva trama, no existen límites en ese mundo. Y lo mejor de todo es que mientras alguien lea. Esos universos, esos personajes e incluso los autores van a ser eternos.

¿Por Qué Tanta Pendejada?

Pleno siglo XXI y todo marcha tan rápido y existe un cambio constante, hasta la estupidez humana evoluciona.  el país no es la excepción, seguimos siendo los mismos come mierda que hace 20 años, estamos tan adoctrinados, tan polarizados que todo genera peleas y conflictos. El Salvador puto país tercermundista  donde la gente pelea por la selecta, por la LMF(Liga Mayor de Futbol) , partidos internacionales (Barcelona y Real Madrid) pero sobre todo por los políticos. existe una gran división entre derecha e izquierda en este pedazo de tierra, que la gente recurre incluso a los golpes para defender los colores de su partido.

 

Salen a marchar por un par de piezas de don pollo ( ni siquiera les dan pechugas)  por un par de dólares sin si quera saber de qué se trata la protesta. pierden la dignidad por una camisa con la bandera de su partido o por una escoba. ¿En serio gentes, en serio? .

mientras ustedes viven enemistados, puteandose, golpeándose, escapándose se a matar por su partido político, ellos le roban en su cara, le aumentan a los impuestos, empeoran su calidad de vida y no hacen nada por la seguridad de el país. Se ríen en su cara y usted estimado amigo/a  lo permite. porque sigue votando por los mismos inútiles, porque en lugar de tener un pensamiento crítico y preocuparse por la realidad nacional. prefiere ver al ridículo del gordo max, se llena de mierda su cabeza con programas basura como el numero 1, con novelas como la rosa de Guadalupe y no se cuanta pendejadas más y por si esto no fuera poco. una de las principales características de los salvadoreños es indignarse por cosas tan estúpidas como el hecho de que no dejaran entrar a un bar a tipo porque eso es «clasismo» háganme el puto favor.!!!!!

 

Seamos serios amigos dejamos de hacer chiste de lo serio y de hacer serio el chiste ( Tiembla Coelho con mis reflexiones) dejemos de idolatrar tanto a los políticos que nos están robando y están haciendo mierda a este país. Dejemos de creer que Nayib es el mesías que ha venido a salvarnos

vemos en las redes sociales cosas como «Nayib el mejor politico» Nayib pegame un bicho» «Todos Somos Nayib» (malditos ridiculos) ó que en ARENA vamos a encontrar la solución. son este tipo de cosas y actitudes imbéciles que hacen que quiera gritar ¡PAREN EL MUNDO QUE ME QUIERO BAJAR! porque en serio me quiero bajar de este asqueroso viaje en donde tengo que soportar a toda esa gente fanática que vive endiosando a políticos que no hacen otra cosa que robarse todo lo que tienen enfrente

Es realmente vergonzoso que incluso en las redes sociales los mismos políticos  se lancen indirectas o que se vean envueltos en pleitos sin sentidos y que la misma gente tome partido de esto.  en ese mesón llamado twitter por ejemplo:

todos los días siempre hay alguien peleando por su partido político y creyendo que sus candidatos son mejores que los del partido contrario cuando no es cierto.

Lo más difícil es el hecho de aceptar que son tan pendejos que no van a cambiar, van a seguir votando por los mismos políticos, permitiendo que les roben y se rían en su cara e indignándose por cosas triviales.